Una aplicación eficiente de las reglas del Home Staging, además de la revalorización de tu vivienda, aporta un acortamiento del tiempo que demora su venta o alquiler. El home staging es una técnica de marketing de bienes raíces importada de Estados Unidos que, mediante la preparación de la propiedad para exponerla al público, incrementa el número de visitas de potenciales compradores.
El Home Staging (escenificación del hogar) nació en los años 70, fruto de la intuición de un joven agente inmobiliario, Barb Schwarz. Entendió que debe mejorar la imagen de los inmuebles con el fin de promover su venta o arrendamiento en el plazo más corto y con el mejor precio posible.
Las acciones del Home Staging no deben confundirse con la decoración de interiores. Un home stager profesional tiene en cuenta la mentalidad del comprador, y optimiza la propiedad para mejorar la impresión que produce. Se trata de un lavado de cara, más de índole psicológico, que aporta impresión de calidad y la revalorización de tu casa.
Home Stanging para revalorización de tu vivienda en alquiler
¿Ves la diferencia entre las dos y la sensación que provoca cada una?
Las decisiones de compra suelen tomarse con rapidez y con un fuerte componente instintivo, y el profesional debe cuidar cada detalle de esa primera impresión. La primera acción que lleva a cabo el profesional consiste en retirar fotos de los actuales habitantes, dibujos de los niños en la nevera, etc., para que los visitantes no tengan sensación de ser intrusos.
Otras acciones que suelen tomarse para mejorar la impresión visual consisten en arreglar pequeños fallos de mantenimiento (bisagras de puertas que chirrían, o lamas de persianas deterioradas, limpieza, etc.). Estos mínimos problemas, causados por el uso diario, redundan en el subconsciente del visitante como síntomas de baja calidad de la propiedad, y reducen su valor de venta.
Una propiedad excelente en alquiler, pero decorada con escaso gusto, o recargada, puede causar una sensación de rechazo. El home stager se encargará de aligerar la impresión visual, así como buscar un equilibrio que incremente la sensación de habitabilidad. Cuanto más se tarda en vender la propiedad, más valor de mercado pierde.
Una casa decorada con gusto puede plantear problemas para su alquiler si resulta muy acusada la personalidad del dueño. Esta regla se aplica también a estilos decorativos, como el minimalismo, que a algunas personas puede producir una sensación de vacío. El home stager modifica, quita o añade elementos para que la casa resulte interesante al mayor número de perfiles de comprador.
Home Staging para las viviendas de obra nueva
A muchas personas les cuesta imaginar el encaje de sus muebles y enseres en un espacio vacío. Las casas de obra nueva plantean ese desafío ante los visitantes. La sensación de frialdad ante una habitación vacía, puede arrojar dudas sobre una decisión de compra, respecto a la de un inmueble de la competencia (de peor calidad, pero amueblado).
Un home stager profesional no necesita invertir en muebles caros para acondicionar una vivienda. Puede amueblar con mobiliario de atrezo una vivienda vacía, las zonas ajardinadas, e incluso la cocina, si carece de electrodomésticos.
Como no hay excesos decorativos que corregir, ni carencias de mantenimiento que restañar, su labor se centra en elaborar una escenificación decorativa que invite a habitar la casa y que no muestre un carácter muy acusado de un estilo determinado.
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